El icónico centro gastronómico y de entretenimiento, El Viejo Rancagua, abrió sus puertas nuevamente bajo la dirección de Bernardo Ponce. Con 15 años de éxito culinario con El Bajón, Ponce se embarca en el ambicioso proyecto de revitalizar este emblemático local. Ofreciendo una fusión de tradición culinaria y cultura bohemia, El Viejo Rancagua busca reencantar a su público con una propuesta que incluye amplia variedad de chorrillanas gourmet, bebidas típicas y música criolla en un ambiente seguro y acogedor. descubre la magia renovada de un lugar lleno de historia y sabor.
El Viejo Rancagua es mucho más que un simple local; es un símbolo cargado de historia y memorias. Conocido por sus numerosas visitas de personas importantes y eventos memorables, este lugar ha sido un punto de encuentro en la ciudad de Rancagua. Sin embargo, en los últimos años, había caído en otra dinamica que no era la que estaban acostumbrados las personas que lo visitaban cada vez que buscaban un espacio para disfrutar de una noche cargada de buenas ondas. Nos sentimos profundamente conmovidos por su estado y, gracias a la confianza de don Guillermo Drago, el dueño de este local, y nuestro éxito con El Bajón, decidimos embarcarnos en la emocionante tarea de revivir el Viejo Rancagua, comenta Bernardo Ponce, su nuevo representante.
En El Viejo Rancagua, hemos diseñado una propueta gastronómica única, con una carta que fusiona lo tradicional con lo innovador. Ofrecemos siete tipos de chorrillanas, todas acompañadas de nuestras exclusivas salsas. La más popular es La Marina, que incluye pulpo, champiñones, camarones y ostiones, acompañada de una deliciosa salsa de la casa. También contamos con la clásica chorrillana con carne mechada, cebolla caramelizada y huevos fritos.
Queremos mantener viva la tradición del Viejo Rancagua con bebidas típicas como el pipeño, la borgoña y el navegado, integrando estos sabores con nuestra propuesta gourmet.
El Viejo Rancagua no es solo un lugar para comer; es un espacio para la cultural. Hemos recibido propuestas de músicos y grupos que han tocado aquí en el pasado, y queremos que la música criolla vuelva a ser el alma del local. Nos retroalimentamos de la gente que nos visita y de aquellos que han sido parte de la historia del Viejo Rancagua, para rescatar y revivir su esencia.
Entendemos la importancia de la seguridad en estos tiempos. Por eso, hemos implementado un sistema de vigilancia para garantizar la tranquilidad de nuestros clientes tanto dentro del local como en el estacionamiento. Contamos con un cuidador de autos y medidas de resguardo internas para que todos puedan disfrutar de su visita sin preocupaciones.
Nuestro sueño es que El Viejo Rancagua sea reconocido a nivel nacional e internacional como una propuesta turística. Estamos trabajando en colaboración con hoteles locales para atraer turistas y mostrarles este tesoro histórico. Queremos que Rancagua sea un destino turístico destacado y que El Viejo Rancagua juegue un papel crucial en esa transformación.
Nuestro objetivo es ofrecer un servicio con excelenencia, una experiencia memorable a cada cliente. Valoramos la retroalimentación de nuestros visitantes y la experiencia de la antigua clientela. Queremos que cada persona que cruce nuestras puertas se sienta parte de esta nueva etapa del Viejo Rancagua.
En El Viejo Rancagua, la atención al cliente es una prioridad absoluta es un servicio de primera clase. Nuestro equipo de garzonas se distingue por su calidez, amabilidad y profesionalismo. Cada una de ellas está comprometida a brindar una experiencia excepcional, asegurándose de que cada visita sea memorable. Desde el momento en que nuestros clientes cruzan la puerta, son recibidos con una sonrisa y un servicio atento, siempre dispuestas a satisfacer cualquier necesidad y a garantizar que todos se sientan como en casa. Su dedicación y esmero reflejan el espíritu acogedor y familiar que queremos transmitir en cada rincón de El Viejo Rancagua.
En esta entrevista exclusiva concedida por Bernardo Ponce, el nuevo propietario de El Viejo Rancagua, compartió su visión y entusiasmo por este proyecto. Bernardo nos habló con pasión sobre los desafíos y las oportunidades que ha encontrado en este camino. “Siempre me llamó la atención este local por su trayectoria y lo que representa para la ciudad. Verlo cerrado y en decadencia me parecía triste. Así que, cuando don Guillermo Drago, que es un cliente nuestro de muchos años en El Bajón, nos propuso encargarnos del Viejo Rancagua, lo vi como una oportunidad única para devolverle la vida a este espacio histórico."
Bernardo Ponce se muestra optimista y decidido: "Nos sentimos muy afortunados de tener la oportunidad de revivir un lugar tan emblemático como el Viejo Rancagua. Nuestro objetivo es reencantar a la gente, ofrecer una experiencia culinaria única y ser un punto de encuentro para la cultura y la música criolla."
Estamos convencidos de que este es solo el comienzo de una nueva y hermosa historia para el Viejo Rancagua.
Invitación a la Comunidad
Invitamos a toda la comunidad a redescubrir el Viejo Rancagua. Tenemos un equipo de garzonas dedicadas a brindar la mejor atención y un local que combina la belleza de lo antiguo con la comodidad moderna. Aunque los tiempos son difíciles, creemos firmemente en el poder de la comunidad para mantener vivo este espacio.
Horarios y Ubicación
El Viejo Rancagua está ubicado en Paseo Estado con Gamero. Abrimos nuestras puertas a las 8 de la mañana para ofrecer desayunos deliciosos, como la pailita de huevos, queso fresco y palta, acompañados de leche caliente. Queremos que cada visita sea un viaje en el tiempo y una experiencia única.
Ven y vive la experiencia del Viejo Rancagua. ¡Te esperamos!
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