Macaya reafirmó que se debe ofrecer una alternativa a los chilenos, que ya en el plebiscito de entrada se manifestaron mayoritariamente por una nueva Constitución. En tanto, la secretaria general, María José Hoffmann, sostuvo que “ha llegado el minuto de terminar con el inmovilismo en nuestro sector”.
Reforzando la postura que ha manifestado en las últimas semanas y que reiteró el domingo, el presidente de la UDI, Javier Macaya, insistió hoy en que la centroderecha y todos los sectores políticos deben ofrecer una alternativa al país en caso que gane el Rechazo en el plebiscito constitucional del 4 de septiembre.
El senador remarcó la importancia de atender la voluntad manifestada por la mayoría de los chilenos en el plebiscito de entrada, independiente del resultado que se logre en el referéndum de salida.
“Somos conscientes de que más del 80% de los chilenos en octubre de 2020 dio el vamos al cambio constitucional en Chile”, comenzó diciendo en un punto de prensa en la sede de la UDI.
“Hoy día estamos convencidos y entendemos que la vocación democrática que se manifestó en ese plebiscito de entrada hace que el cambio constitucional en Chile no pueda terminarse en caso que la opción Rechazo triunfe en el plebiscito del 4 de septiembre”, señaló, junto con manifestar que “para nosotros es muy importante entregar la garantía de que el proceso constituyente sigue y no se agota en lo que ocurra el 4 de septiembre”.
“Tenemos que ser capaces de recoger esa esperanza en un sentido democrático”, agregó, recalcando que “en caso que gane la opción Rechazo, nosotros creemos que hay que canalizar una solución para que Chile pueda cerrar el ciclo constitucional”. Esto, ya que a su juicio “el borrador que está terminando de hacer la Convención divide a Chile”.
Hoffmann: “Ha llegado el minuto de terminar con el inmovilismo en nuestro sector”
En la misma línea, la secretaria general de la UDI, María José Hoffmann, complementó lo planteado por Macaya y dijo -en alusión a las reacciones que se han generado en algunos sectores de la centroderecha- que “sabemos que estamos rompiendo huevos”.
“Nosotros sentimos un profundo orgullo no solamente de la historia de la UDI, sino que de la historia de la centroderecha, pero ha llegado el minuto de terminar con el inmovilismo en nuestro sector”, planteó Hoffmann.
Y agregó que “parte de los problemas que hemos tenido y de las derrotas que hemos tenido tiene que ver con no haber sido capaces de entender y de hacer muchos cambios sociales antes”. Al respecto, afirmó que “esa es una autocrítica que hay que hacer con mucha humildad”.
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